El alcalde Francisco Peña es sinvergüenza o se hace el loco, o ambas cosas a la vez

El alcalde de Santo Domingo Oeste, Francisco Pena, con el caso de la réplica de la torre Eiffel que instaló frente a la Plaza de la Bandera, es sinvergüenza o se hace el loco, o ambas cosas a la vez.
No solo por el hecho de que con la instalación de la torre en el lugar enajena el solemne espacio reservado para la Bandera Nacional, sino por los muchos traspiés que ha estado dando con declaraciones estrambóticas para justificar su descabellada idea.
Primero dijo que no sabia que esa estructura era una replica del mas visitado monumento del mundo en términos turístico; un símbolo reconocido mundialmente como el mas trascendente de París, la capital francesa, la Ciudad Luz.
Llegó a declarar que no sabía lo que era eso y que lo compró (lo compró a pesar de que no sabía lo que era) porque se lo estaban vendiendo barato. Supuestamente le dijeron que la torre tenía un valor de 2 millones y medio de pesos, y se la estaban dando en 500 mil pesos; una «ganga»… Aprovechó la oferta, cogió su «aparato» y lo fue a plantar frente a la Plaza de la Bandera… Vaya Usted a ver…!
Y, como para ponerle la tapa al pomo, como para burlarse de quienes han criticado su profanadora acción, ha declarado que de República Dominicana van muchas personas a Francia a retratarse en la autentica torre Eiffel, por lo que invitan a quienes así lo deseen, a retratarse en la que él ha instalado en Santo Domingo Oeste…
El hombre es sinvergüenza o se hace el loco, o ambas cosas a la vez.